martes, 18 de octubre de 2011

El nuevo amor

Qué es el amor. Según las definiciones populares, el amor es un sentimiento intenso, es la unión con otro ser, es un sentimiento hacia otra persona, es atracción, es una completa alegría, es afecto, es entrega hasta otra persona, es suavidad. Para ti, ¿qué es el amor?. Cada uno define el amor según le ha tocado vivirlo, el amor es fiel para algunos, para otros es seguridad, para otros es incondicional, incluso para algunos traición y tristeza. De la manera en que fuimos amados entonces amamos.

El apóstol Pablo define al amor como una parte del fruto que produce el Espíritu Santo en la vida de alguna persona. Sin embargo la definición de amor en Gálatas 5:23 es diferente a la definición que conocemos comúnmente. Es necesario olvidarnos del significado humano y aprender el significado divino; entonces amaremos de manera sobrenatural. La verdad es que el ser humano no sabe amar, solamente repite patrones de conducta, es por eso que necesitamos un nuevo estilo o ejemplo de amor, que sobrepase nuestro pensamiento actual y nos garantice un futuro mejor.

Según la Biblia hay tres tipos de amor: eros, phileo y ágape. Es decir, que en el idioma original en que se escribió la Biblia venían estas palabras, pero al traducirse al español se les denominó como amor a las tres. El amor eros es el amor que se refiere a lo sexual, es el amor que se refiere a la atracción entre hombres y mujeres; de hecho en la Biblia solo se menciona esta clase de amor dos veces en el Antiguo Testamento. La segunda definición de amor es phileos, este se refiere al amor fraternal, referente a los amigos a la familia. Vemos un ejemplo de la aplicación de esta palabra en el evangelio según San Juan 11:3, donde Lázaro, muy amigo de Jesús, está enfermo, así que cuando llega Jesús a verlo Martha, la hermana de Lázaro, dice: “he aquí el que amas está enfermo”. Habla de un amor entre amigos. Sin embargo la clase de amor que más se menciona en la Biblia, es el amor ágape.

Si ya hablamos del amor entre amigos o familia (phileo) y el amor entre pareja sexualmente (eros), entonces a qué se puede referir la tercer clase de amor (ágape). El amor ágape es inteligente, racional y tiene voluntad. Se refiere a un amor desinteresado por los demás. El ejemplo más claro es el de Jesús, Él nos amó sin merecerlo. En la carta de Pablo a los Romanos capítulo 5 del versículo 6 al 10 nos habla de que Jesús amor a tres clases de personas: malvados, pecadores indignos y enemigos. Al leer “malvados” pensamos en los villanos de las películas de caricaturas, sin embargo todos caemos en alguna de esas opciones. A pesar de eso Jesús DECIDIÓ amarnos, con todos los peros que tenemos, que son bastantes, pero su amor sobrepasa todo eso. Es la misma clase de amor que como cristianos debemos aspirar a tener por nuestros semejantes. El amor ágape es un Don de Dios, significa conocer personalmente a Dios y entonces derramar ese amor a los que nos rodean.  Es lo mejor que existe y es la mejor posesión que podríamos tener, sin embargo no funciona hasta que lo derramamos a otros. Dice el evangelio según San Juan 3:16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” Jesús nos amó para darnos vida eterna, este es el amor ágape; ahora amemos a los demás de la misma manera.

Debemos aprender y crecer como lo hizo Pedro. El ejemplo del discípulo Pedro es realmente interesante y muy semejante a como somos nosotros. Pedro era 100% sentimental, siempre le decía a Jesús, su maestro, que lo amaba y que daría todo por él. Sin embargo cuando se sintió amenazado y bajo presión de los romanos, cuando su vida corría peligro, entonces, basado en emociones, negó a Jesús. No era capaz de tener un amor completo, íntegro, congruente, estaba fundado en la emocionalidad del momento. Es por eso que Jesús, al resucitar, habla con él personalmente y le pregunta varias veces “Pedro me amas”, enseñándole a cambiar su amor y ser incondicional, tener un amor basado en decisiones.

Lamentablemente como jóvenes no aprendemos la diferencia, mucho de lo que llamamos “amor” es sentimiento, emoción o pasión; lo que da como consecuencia: depresión, divorcios & tristeza. Basar nuestras relaciones en un amor efímero y sentimental trae como consecuencia decisiones sentimentales y emocionales sin fundamento alguno y bastante débiles. El mismo Pablo en la carta a los Efesios cuando se refiere al amor entre esposo y esposa el original de la Biblia dice “ágape”, es decir, ama a tu esposa como Jesús te amo. En la vida diaria, ¿cómo podemos amar con amor ágape? Siendo amables, sonriendo, no criticando, no haciendo chismes, perdonando, sin chantajes, sin egoísmo… Aprende el nuevo concepto de amor ágape, aplícalo en el día a día y que sea la marca de que Dios está contigo.

Cambio y Fuera!